Loreto: casa de María.
10 de diciembre, festividad de la Virgen de Loreto. Aquí una reflexión que nos hace llegar Angélica Diez, Misionera de la Inmaculada Padre Kolve.
La Virgen de Loreto o Nuestra Señora de Loreto es una advocación mariana católica, su festividad se celebra el 10 de diciembre. En España y en otros países es la patrona de las fuerzas aéreas y de la aeronáutica.
El Santuario de Loreto es uno de los principales lugares marianos de peregrinación de Italia y Europa. En su interior se custodia, según una antigua tradición, la Santa Casa, la casa de la Virgen en Nazaret trasladada milagrosamente a esta localidad italiana. En Nazaret la casa constaba de dos partes: una gruta, que todavía se puede contemplar en esa localidad de Galilea, y la construcción en ladrillo, que es la que se puede venerar en Loreto. En el interior de la humilde construcción se encuentra la capilla dedicada a la Virgen, donde se venera la conocida imagen. El papa Francisco fue a Loreto el lunes 25 de marzo del 2019, día de la Solemnidad de la Anunciación del Señor a entregar a la Virgen la Exhortación postsinodal del reciente Sínodo de los Obispos sobre el tema “los jóvenes, la fe y el discernimiento vocacional” realizado en el Vaticano del 3 al 28 de octubre de 2018.
“La Santa Casa es la casa de los jóvenes, porque aquí la Virgen María, la joven llena de gracia, continúa hablando a las nuevas generaciones, acompañando a cada uno en la búsqueda de su vocación”. Por ello, “he querido firmar aquí la Exhortación Apostólica fruto del Sínodo dedicado a los jóvenes. Se titula ‘Christus vivit’, ‘Cristo vive’. Aquí, se custodian los muros que, según la tradición, provienen de Nazaret, donde la Virgen Santa pronunció su ‘sí’, convirtiéndose en Madre de Jesús”.
Por otro lado, dijo el papa: “La Casa de María es también la ‘casa de la familia’. En la delicada situación del mundo actual, la familia fundada en el matrimonio entre un hombre y una mujer asume una importancia y una misión esenciales. Es necesario redescubrir el plan trazado por Dios para la familia, para reafirmar su grandeza e insustituibilidad al servicio de la vida y la sociedad”.
También “la Casa de María es ‘la casa de los enfermos’. Aquí encuentran acogida los que sufren en el cuerpo y en el espíritu, y la Madre trae a todos la misericordia del Señor de generación en generación. La enfermedad hiere a la familia y los enfermos deben ser acogidos dentro de la familia. El hogar y la familia son los primeros cuidados de los enfermos para amarlos, apoyarlos, alentarlos y cuidarlos. Por esta razón, el santuario de la Santa Casa es el símbolo de cada hogar acogedor y santuario de los enfermos. Desde aquí les envío a todos, en cualquier parte del mundo, un pensamiento afectuoso”.
En esa Santa Casa se inauguró el primer Ave María de la historia pronunciado por el ángel Gabriel : “Alégrate, llena de gracia”, esta frase resuena de forma singular en este Santuario donde se nos invita a contemplar el misterio de la Encarnación del Hijo de Dios. Que al rezarla personalmente, en familia y en comunidad la Virgen Santa nos ayude a todos, “… a recorrer un camino de paz y de fraternidad basadas en la acogida y en el perdón, en el respeto del otro y su amor que es don de sí. Que sea Ella, nuestra Madre, estrella luminosa de alegría y de serenidad quien done a las familias, santuarios del amor, la bendición y la alegría de la vida” (Papa Francisco).
Angélica Diez, Misionera de la Inmaculada Padre Kolbe, Olavarría.
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