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eSports y videojuegos: ¿la profesión del futuro?

El crecimiento de estos mercados, junto con unas perspectivas optimistas, hacen necesario reclutar a muchos nuevos talentos y personal adecuadamente formado, lo que lo convierte en una salida laboral muy interesante.

El peso del sector de los videojuegos en la economía mundial no deja de crecer. El ocio digital es, hoy, uno de los sectores más potentes a nivel internacional y los videojuegos son su pilar más sólido. En la actualidad, el valor de este mercado está por encima de los 250.00 millones de dólares a nivel global, con previsiones de superar los 350.000 millones en unos 3 años. Por tanto, su crecimiento parece estar acelerándose. La eclosión de los juegos para celular, una de las grandes fuentes de ingresos de este sector, ha aumentado el público objetivo y, por tanto, el número total de clientes, que continúa al alza. Tan sólo en Argentina ya hay más de 19 millones de jugadores.

Una de las principales consecuencias de este fenómeno es el impacto en el marcado laboral. Hoy, las profesiones relacionadas con los videojuegos están entre las mejor consideradas, dada la increíble demanda que existe de personal. Se trata de un conjunto de trabajos que son necesarios para consolidar todo el proceso de creación de estos títulos. Nos referimos, por ejemplo, a programadores de juegos, diseñadores 3D, guionistas, expertos en estrategias, productores, desarrolladores, jefes de proyecto y tantos otros.  

Este es un mundo de oportunidades que va más allá del futuro profesional de la persona: puede, incluso, tener un reflejo en la economía de un país. Gracias a las posibilidades de formación en línea y al aumento del trabajo a distancia, son personas de todos los puntos del planeta los que pueden acceder a estos puestos de trabajo, habitualmente con sueldos elevados, y contribuir a las finanzas nacionales. Además, con los conocimientos adquiridos, pueden aportar mucho a las empresas nacionales y al aprendizaje y la motivación de otros ciudadanos. 

Pero, a este fenómeno, hay que sumarle algunas derivadas. El crecimiento del sector y la popularidad de los videojuegos han propiciado la consolidación de algunas de sus ramificaciones. Es el caso de los eSports, las versiones competitivas de estos juegos, realizadas por profesionales y retransmitidas a través de las redes sociales. Hoy ya producen más de 1.100 millones de ingresos al año, con una cifra que pronto estará cerca de los 600 millones de espectadores anuales. Este es otro mercado que no deja de crecer y que ya necesita de nuevos profesionales para continuar expandiéndose.

Si pensamos, por ejemplo, en un evento como el LOL Worlds de 2022, con más de 5 millones de espectadores de pico de audiencia, podemos hacernos una idea de los recursos humanos y empresariales necesarios para sacar adelante este espectáculo que, además, tiene una duración de varias semanas. Es cierto que no todos los torneos consiguen estas cifras, después de todo, los eventos de League of Legends son los que más público congregan y que más atención despiertan en los portales de apuestas especializados, dada la trascendencia de las principales competencias de LOL en el panorama de los eSports. Pero la gran cantidad de campeonatos que existen en la actualidad implican contratar personal de muchas áreas, como montadores, “streamers”, seguridad, hostelería y tantos otros. El mundo de los deportes electrónicos va más allá de los competidores.

Eso sí, en ambos casos, tanto eSports como videojuegos, deberemos tener en cuenta que la competencia empresarial es feroz, por lo que el nivel de exigencia, especialmente a nivel de formación, puede ser bastante alto. Pero se trata de una formación con mucho futuro, ya que el componente tecnológico abre muchas salidas laborales. Aunque el aprendizaje pueda ser a distancia, es muy interesante para un país poder ofrecer centros prestigiosos de formación, de cara al crecimiento económico y a la imagen internacional.

En conjunto, estamos ante una gran oportunidad para aquellos que vayan a incorporarse al mercado laboral, los que quieran mejorar sus condiciones o los que estén valorando dar un cambio a su carrera profesional. Pero, además, como ya hemos señalado, el potencial de crecimiento no sólo debe medirse a nivel individual, pues esta es una potencial posibilidad para la creación de riqueza nacional; especialmente, en un país con gran cultura de los videojuegos y equipos muy competitivos en los eSports.